LOS ANGELES, Estados Unidos.- Una nueva batalla se abre en la guerra por la hegemonía del mercado de las tabletas. El fabricante norteamericano Microsoft presentó la nueva Surface, preparada para funcionar con Windows 8, el nuevo sistema operativo de la firma.

El propósito de la firma es evidente: competir con el iPad de Apple y, mediante un soporte más grande, luchar contra los "ultrabooks". Se trata de una versión delgada, que incluye un chip Nvidia, diseñado por ARM Holdings.

Además, será el primero en comercializarse, al mismo tiempo que se produzca el lanzamiento del Windows 8. También se ofrecerá una segunda tableta, más pesada, que incorpora procesadores de Intel, y que estará disponible en dos versiones: una de 64 y otro de 128 GB.

El desarrollo de Surface es una muestra elocuente del cambio de estrategia de Microsoft, que apunta a seguir los pasos de Apple, al integrar hardware y software. Esta fórmula llevó a la empresa de la manzana a convertirse en referente del sector de las tabletas y de los celulares inteligentes. (Especial)